El café es una de las bebidas que está presente en todos los extractos de la sociedad venezolana, Andes. Costas y llanuras degustan diariamente sin distinción social, las bondades de una buena taza de café.
En este post nos enfocaremos en los llanos de Venezuela, y su consumo en esas regiones.
El café en Venezuela
España llevó muchas cosas malas a estas tierras, sin embargo, el café no fue una de ellas.
El origen del café de Venezuela se remonta al 1730 cuando los misioneros españoles empezaron a plantarlo en Venezuela.
Desde esos años hasta hace poco más de 100 años Venezuela jugó un papel muy importante en la producción de café a nivel mundial, pero el descubrimiento del oro negro y su explotación se apoderó de la economía, produciendo la migración de la mano de obra a las ciudades petroleras , decayendo el cultivo y producción de este rubro.
Actualmente, se está intentando recuperar la producción de café. Sin embargo, será una tarea titánica llegar a los niveles de producción de café que Venezuela tenía un siglo atrás.
El café cultivado se caracteriza por "sabores brillantes y un acabado limpio y crujiente". También es más ligero y de estructura más simple, pero tiene menos acidez que otros cafés latinoamericanos.
Para el año 1900 empieza a operar la primera empresa tostadora venezolana, Café Fama de América, fundada por el español de origen canario, Bernardo González Palenzuela
Las regiones con mayor producción de café en Venezuela se localizan en los estados Lara, Portuguesa, Trujillo, Barinas, Falcón, Yaracuy, Monagas y Anzoátegui. Se trata de zonas montañosas, en las que los cafetales se ubican entre los 600 m.s.n.m y los 1600 m.s.n.m, o incluso, en algunos casos, los 1.800 m.s.n.m.
En los cafetales venezolanos crecen diversas variedades de café, todos arábicas que los caficultores procesan, mayoritariamente, por vía húmeda y natural. La primera variedad de café que se cultivó en el país fue la Típica. A ella se sumaron posteriormente, los Bourbons, Caturras y Catuaí.
Tueste
El tueste va a variar dependiendo de la variedad utilizada. Normalmente los cafés de la variedad robusta se tuestan más tiempo y a una temperatura superior para enmascarar y eliminar los posibles defectos que pueda tener.
Mientras que el café arábico no se suele tostar tanto ya que no quieres enmascarar nada, sino resaltar sus aromas frutales y sabor suave.
El café en los llanos
Apenas despunta el día , el llanero está listo para las labores del llano, una buena taza de café cerrero es el combustible perfecto para entrar en calor y despabilarse y chocarle de frente a la ardua faena por trajinar. Como dice el popular corrio del Guerrero
Al café y a los caballos grita el caporal del hato alentando a los obreros ...
A tempranas horas ya se percibe ese inconfundible aroma a café recién colado. No hay casa que se visite en los llanos en la que no te ofrezcan una tacita de café.
Un guarapo o guayoyo, ameniza las conversaciones en las tardes llaneras, este es un café suave, mas claro y menos fuerte.
Foto cortesia de @luimari